William-Adolphe Bouguereau - Dante y Virgilio en el Infierno (1850)

William-Adolphe Bouguereau – Dante y Virgilio en el Infierno (1850)

Según el tuitero y Papa Benedicto XVI « la casa de Satanás existe y es eterna ». No quisiera contradecir a tan alta autoridad, pero me gustaría puntualizar que aunque no tenga final, sí tuvo un origen. El Apocalipsis de San Juan ya menciona los convulsos sucesos que llevaron al Diablo a habitar el Infierno. Pero fue una de las obras clave de la literatura universal, El paraíso perdido de John Milton, la que nos dio a conocer en detalle el fallido golpe de Estado celestial, liderado por un ángel singularmente majestuoso y audaz que quiso arrebatar el trono de los Cielos al mismísimo Dios. Un alzamiento que dio lugar a una batalla acojonante que partió el universo en dos y cuyo eco aún resuena en nuestros días. Así ocurrió. Nuestro protagonista, conocido bíblicamente como La Serpiente Antigua, El Gran Dragón Rojo, El Acusador de Hermanos, El Ángel del Abismo, Lucifer, Mammón, Belzebú, Abaddon, השָׂטָן, Belial, El Espíritu Inmundo y El Dios de Este Siglo entre otros muchos motes que nos asoman a lo que debió ser una infancia difícil, vivía junto a los demás ángeles en el Cielo antes de que la Tierra y el ser humano fueran creados, en un entorno de lujo y armonía aunque con una oscura indignación que iba apoderándose de él. Cierto día, congregó en su suntuoso palacio a gran número de seguidores, que según Daniel Defoe en su erudito Historia del diablo oscila entre 10.511.675,5 (ese medio correspondería a lo que posteriormente sería un cura veneciano) y nada menos que 15.000.050.000.002 billones, debía de ser un palacio bastante amplio en cualquiera de los casos, y una vez en torno a él reunidos, los arengó de esta manera : « Tronos, dominaciones, principados, / Virtudes, potestades, si estos títulos / Ilustres permanecen todavía / Como no meramente nominales / Ya que otro se arroga todo el poder / Y nos deja eclipsados con su nombre / De Rey ungido. »

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Ilustración : Wikimedia Commons.